Últimamente hemos visto diversos casos en donde cibercriminales se encuentran enfrentando procesos legales por actos en los que se ha beneficiado económicamente o afectando a terceros.

Hace unos días les hablábamos del hacker ruso que recibió la mayor sentencia en la historia para un cibercriminal, ahora es el caso de Adam Mudd, un adolescente que creó un software que brindaba el servicio para realizar ataques de negación de servicios (DDoS) y que hoy en día está por enfrentar una condena que lo llevará a prisión. En este caso podemos ver que esta nueva modalidad de ataque DDoS puede ser ejecutada mediante un servicio brindado mediante un software, un tema bastante interesante y que seguramente veremos más sofisticación por parte de atacantes en un futuro.